¡Soy el mejor!

                                                                     Un abogado emplazó a una corporación grande y acusó a sus funcionarios de incumplir un contrato que tenían con él. En el tribunal pidió una enorme suma de dinero para cerrar el caso. De hecho, la cantidad era tan inusitadamente alta que el juez preguntó al abogado por qué exigía tanto. El abogado respondió:"Lo hago por una razón" Luego, con la cabeza erguida proclamó: "Soy, usted comprenderá, el mejor abogado del mundo"
                                                                     Cuando el juicio concluyó, un amigo le preguntó: "¿Porque te jactaste de ti de esa manera?"
                                                                     Sin pestañear, el abogado respondió: "No podía hacer nada más.Des pues de todo, hablaba bajo juramento.Tenía que decir la verdad"
                                                                     La opinión que tenía ese hombre de sí mismo me hizo pensar en las palabras del apóstol Pablo. Dijo que un cristiano no debe tener "más alto concepto de sí conforme a la medida que Dios repartió a cada uno" La persona que se enamora tanto de sí misma que cree que es mejor que los demás se cae de muy alto.
                                                                      Cuando cantas tu propia tonada siempre desentonas.

Como graduarse con matrícula de honor

                                                                     Viviendo una vida centrada. Los grandes triunfadores se centran en su meta. Tienen una mente tan decidida que en ocasiones se les considera fanáticos. Filtran lo que no es esencial y se enfocan en su meta como un láser, mientras que todos los demás a su alrededor llevan una vida repleta de proyectos de mucha palabrería que nunca ponen en marcha. La obsesión de Pablo era su llamado. " Una cosa hago: olvidando lo que queda atrás y esforzándome por alcanzar lo que está delante, sigo avanzando hacia la meta para ganar el premio que Dios ofrece mediante su llamamiento...." .Le importaba tanto su llamado, que cualquier otro interés dejaba de ser relevante. No permitió que nada ni nadie le impidiera ganar. Sabía que no bastaba con ser fuerte en la fe, había que ser fuerte en la "batalla".
                                                                     A veces el miedo, las críticas y los fracasos del pasado dictan hacía donde vamos, y nos desviamos sin rumbo fijo en nuestro caminar diario. El futuro nos invade, pareciéndose mas al pasado. Prestamos toda nuestra atención a lo que es urgente y esperamos que la vida nos favorezca, pero no funciona. Graduarse con matrícula de honor implica: 1) Centrarse. Y el centrarse no surge así sin  mas, sino que debes procurarlo. 2) Pensar con determinación. "...Una cosa hago..." 3) Olvidar los fracasos del pasado. 4) Esperar con impaciencia y seguridad el éxito futuro "...Esforzándome por alcanzar lo que está delante..." 5) Defenderlo a capa y espada "...Sigo avanzando hacia la meta..." Sigue estos pasos, y tú también te graduarás con matrícula de honor.  

Verdadera satisfacción

                                                                       Hacerse rico y famoso no garantiza la felicidad . Si así fuera, los atletas multimillonarios no arriesgarían su carrera usando drogas ilegales. Si así fuera, un abogado de mucho dinero no me habría dicho que con gusto daría todo lo que tiene para que sus hijos cambiarán de comportamiento. Si así fuera, no sería común que las personas famosas se casaran tantas veces . Obviamente la felicidad debe venir de otra fuente que no es la fama y la fortuna.
                                                                        Salomón dijo, que puesto que quienes gobiernan el mundo son pecadores, no debería de sorprendernos cuando a los pobres se les oprima y cuando se niegue la justicia. La vida de aquellos que aman el dinero no es tan de color de rosa como parece. Nunca están satisfechos con lo que tienen, y enfrentan la futilidad de ver a otras personas consumir sus riquezas. El trabajador humilde, que se contenta con poco, puede dormir profundamente, mientras que el hombre rico permanece despierto por las noches preocupándose por su dinero.
                                                                          ¿Y tú? ¿Estás frustado o satisfecho? Pablo escribió que no hemos de ser "altivos", ni poner la esperanza en las riquezas, las cuales son inciertas,sino en el Dios vivo,que nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos. Sólo cuando confiamos en Dios encontramos una satisfacción duradera.    

Buenos padres

                                                                     El columnista de esta historia se crió con un padre a quien describe como físicamente presente pero emocionalmente ausente. En su primer libro sobre la crianza de los hijos, cuenta abiertamente su lucha para aceptar a su padre alcohólico y el clima de terror que este había creado en su hogar. Él reta a todos los hombres a resolver su resentimiento hacia sus padres ausentes o abusivos en lugar de pasarlos a la siguiente generación
                                                                      Hay un pasaje en La Biblia que se aplica a todos los cristianos, pero que tiene un significado especial para los padres. Dice así: "Seguid la paz con todos y la santidad, sin la cual nadie verá a Dios. Mirad bien, no sea que alguno deje de alcanzar la gracia de Dios; que brotando alguna raíz de amargura, os estorbe, y por ella muchos sean contagiados".
                                                                      ¡Piensa en lo que podría pasar en nuestras familias  si vaciáramos nuestros corazones de amargura y nuestra meta fueran las relaciones pacíficas! Si hemos sido bendecidos con un padre sabio y amoroso, debemos de estar agradecidos y seguir su ejemplo.Pero si nuestro padre nos ha fallado, debemos confiar en la gracia de Dios, resolver nuestra ira hacia él, y esforzarnos para ser el padre que nunca tuvimos. No será fácil, pero apo-
yándonos  en el ejemplo precioso de Dios, podemos aprender a ser buenos padres.
                                                                              

La madurez se produce gradualmente

                                                                        ¿Como se describiría a alguien que es espiritualmente maduro? Según un escritor: "La persona madura no se toma demasiado en serio...mantiene la mente alerta...no se alarma fácilmente con cualquier situación adversa que surja..pasa por alto las nimiedades...nunca se cree demasiado importante para hacer cosas pequeñas ni es orgulloso para hacer cosas humildes...no acepta el éxito ó el fracaso como estados permanentes...es capaz de controlar sus impulsos...no le importa cometer errores... tiene fe en sí mismo, la cual se refuerza con su fe en Dios.' Medido por el baremo anterior, ¿donde estás tú? ¿Eres capaz de evaluar tu progreso sin desanimarte, ni sentirte condenado? ¿Puedes tener en cuenta lo que todavía te falta por conseguir y sin embargo valorar y celebrar lo que ya has logrado?
                                                                           La Biblia nos dice que somos transformados  "de gloria en gloria". Es decir que la madurez espiritual se produce gradualmente,con pasos pequeños, no con saltos de gigante, dice que mientras creas que Dios está operando en ti. Hay una correlación entre tu alimentación diaria de las obras de Dios y tu grado de madurez. Y lo mejor de todo es que Dios no nos deja que lo hagamos solos, sino que "somos transformados de gloria en gloria...por la gracia de Dios...      

Saber cuando "salir"

                                                                    Elegir el momento oportuno es parte del plan de Dios para tu vida. Debes saber qué hacer y cuando hacerlo. Si esperas demasiado, te perderás esa oportunidad  que Dios te presentó. Una escritora destaca que como creyentes, pasamos por dos nacimientos: el natural y el espiritual. Escribe lo siguiente: "Para algunos... el nacimiento espiritual sucedió en su infancia; otros como yo, tienen que esforzarse para llegar ahí con una mezcla de esfuerzos y ...de ir peleando capas de independencia.Pero sea como sea que lleguemos a la sala del parto espiritual, en el tiempo oportuno, tenemos que estar dispuestos a nacer de nuevo. No podemos seguir en oscuridad y aislamiento. Cuando llega la hora de que se abra la matriz y seas empujado hacia el mundo como una nueva criatura, tienes que estar dispuesto a salir " .
                                                                    Todos conocemos a personas que asisten a todo seminario habido y por haber y leen todo tipo de libro existente acerca de la superación personal. siempre están a punto de salir, pero nunca lo consiguen. A lo mejor tú eres uno de ellos. A lo mejor Dios te ha dado una visión pero la has dejado dormida durante tanto tiempo que ya está rancia. Las visiones tienen fecha de caducidad, porque son para "...el tiempo señalado..." Maurice Chevalier dijo: Si se espera el momento idóneo, cuando todo esté bajo control y seguro... no se escalarían montañas, ni se ganarían carreras, ni se alcanzaría la felicidad perdurable". En otras palabras, puedes sentarte en las gradas o jugar el partido ¿Qué eliges?.       

Disciplina y orden (2)

                                                                       Los niños bien criados y con quien da gusto vivir no llegan a ser así viviendo en un hogar sin reglas. ¿Has visto la película Bonnie y Clyde? Detrás del comportamiento de Bonnie subyace una madre que la educó y que pensaba que todo lo que hacía la niña era "gracioso". La madre llegó a elogiarla de esta manera: "Así como las flores son más radiantes con el sol y el rocío, este mundo es más radiante con personas como tú" Pero Bonnie no era tan "graciosa" cuando se lanzó a ejecutar una oleada de asesinatos, ¿verdad? Los niños que son educados con límites se sienten más protegidos y seguros. Eh aquí dos pautas: 1) Explícales claramente las reglas. Castigar a un niño por una regla que no entiende no consigue mas que resentimiento por su parte. Cuando menos "reglas" mejor - pero haz que estas sean claras, factibles y que se puedan cumplir - "Sermonear" y moralizar no consiguen mas que crear resistencia. 2) Haz que las reglas se cumplan de manera consecuente.  Si tu hijo hace hoy algo que te hace sonreír, no le pegues por eso mismo en otro momento. Si no eres consecuente, tu autoridad se resentirá y promoverás su desobedencia.. Algunas cosas que tienes que evitar a toda costa: a) .evita las comparaciones. No se debe esperar que ningún niño sea como otro. b). Evita las etiquetas hirientes, eres tonto,perezoso, malo, un desperdicio de tiempo etc.Describe sus acciones pero no ataques su vida personal. c) Evita las amenazas vanas. O lo cumples, o no amenaces. d) .Evita el soborno, porque lo que haces es fomentar la manipulación y disminuir la importancia de las reglas. e) .No hagas bromas de sus debilidades . f). No temas decir que no. Su felicidad y su éxito futuros dependen de cómo aprendan a tratar con los contratiempos. g) . Admite tus errores. Pero a pesar de tus fallos ocasionales, sigue siendo tu responsabilidad hacer que se cumplan las reglas.     

Disciplina y orden

                                                                     Estamos levantando a una generación de niños que se están educando solos, con la ayuda de la televisión, de CD violentos y de Internet(que puede ser un campo de minas). Con frecuencia el padre y la madre trabajan fuera de casa  y dejan que un niño supervise a otro; por consiguiente, ellos mismos ponen las normas. "...El hijo malcriado avergüenza a sus padres" .La mayoría de nosotros somos buenos padres, pero nuestros hijos necesitan disciplina y reglas para vivir. La columna vertebral del amor es la disciplina y el orden, sin ellos, el amor no es más que una licencia para hacer lo que se quiera "No corregir al hijo es no quererlo; amarlo es disciplinarlo..." . Había un tebeo en que el papá de un niño llamado David, con la correa en la mano, le pide al desobediente David que se prepara para un par de azotes. El padre le dice 'Esto me va a doler más mí que a ti '. El niño responde:' No te obligues a hacerte daño por mi culpa papá'.
                                                                       No es fácil establecer el orden y la disciplina, pero si no lo haces , estarás traicionando a tus hijos y la responsabilidad que Dios te ha dado con ellos. Si no disciplinamos a los hijos porque queremos quedar bien  y no enfrentarnos con ellos durante un período corto, a la larga no nos respetarán. Esperar que los niños pequeños decidan por sí solos lo que está bien y lo que está mal es una carga que no deberían llevar; su mente y sus emociones no están lo bastante desarrolladas para asumir tal responsabilidad.Tus hijos aprenden a tomar buenas decisiones al ver las recompensas y las consecuencias de la aplicación de la disciplina en el hogar ¡ No les falles !.          

"¿Qué ganamos con quedarnos aquí sentados?"

                                                                        No prosperarás en la vida a menos de que estés dispuesto a arriesgarte. Hay momentos para ser cautelosos, pero cuando esa cautela se convierte en un estilo de vida, te ahogarás en la mediocridad y el fracaso mientras se pasa la vida. Cuando hayas pedido por algo, y escuchado consejos sabios, es hora de dar un paso de fe. Cuatro leprosos estaban sentados fuera de la sitiada ciudad de Samaria, donde la hambruna era aguda; y consideraron su dilema:'Nos estamos muriendo de hambre y hay comida en el campamento enemigo. Podemos ir a lo seguro, seguir aquí sentados y morir; o ir al campamento, a ver si nos dan de comer o nos matan'. Sabían que la peor alternativa era ser cautelosos y no hacer nada. ¿Qué sucedió? Fueron salvados por dar un paso de fe. Ahora bien, seguro que tus riesgos no son tan extremos; pero a menos que te arriesgues, nunca podrás cumplir la misión que Dios te ha encomendado para la vida.
                                                                         La Biblia dice: "El que cava la fosa en ella se cae. Al que abre brecha en el muro, la serpiente lo muerde. El que pica piedra, con las piedras se hiere.El que corta leña, con los leños se lastima". Si tratas de evitar toda caída, picadura,herida, y todo peligro, te perderás muchas oportunidades. Cambiar en fe se traduce en: 1) Aceptar riesgos necesarios. A veces tienes que jugártelas todas si quieres tener éxito. 2) Prepararse a fondo antes de arriesgarse. Dios recompensa la sabiduría. "Si el hacha pierde su filo, y no se vuelve a afilar, hay que golpear con más fuerza. El éxito radica en la acción sabia y bien ejecutada"    

Mucho cuidado con el orgullo

                                                                        Cuando el rey Nabucodonosor se arrepintió, su "razón ....dignidad y ... grandeza volvieron a (él )... y (fue) restablecido...". En nuestro caso, cuando queremos mantener una imagen, nos cuesta pedir ayuda, por si la gente piensa mal de nosotros. Según un escritor: "Caer es malo, pero caer y no pedir ayuda, mucho peor... muchos están tan llenos de orgullo y autosuficiencia que piensan: 'Aunque no pueda levantarme por mí mismo, no voy a dejar que nadie me ayude', No seas tan soberbio, pues eso mismo es lo que te hizo caer. El orgullo es peligroso, porque te hace vegetar en un estado de desamparo innecesario durante muchos días - y a veces hasta años - .Si hubieras pedido ayuda de inmediato, la podrías haber obtenido y habrías proseguido con tu vida".
                                                                          "Hay camino que al hombre le parece derecho, pero...lleva a la muerte". ¿Has intentado alguna vez rescatar a un animal malherido? Este no sabe que tu único deseo es ayudarlo; solo sabe que está herido, y por consiguiente, ataca a la persona que menos se lo merece. Lo mismo ocurre cuando alguien cercano a ti te ha lastimado, sobre todo si no te lo esperabas. Puede que estés tan dolido que ya no confíes en nadie, ni tampoco en Dios. Evitas a los que te quieren ayudar y no permites que nadie interceda por ti. La Biblia dice: "...No en durezcaís vuestros corazones..." En este día, reconoce que has caído y deja que Dios te restablezca.     

Cuando te sientes decaido

                                                                    Un feligrés preguntó al pastor: ¿Usted no se siente nunca decaído? ¡Claro que sí! respondió. ¿Y que hace al respecto ? insistió el feligrés.'Me vuelvo a levantar'. El problema no es estar decaído, sino quedarme caído. O bien estoy arriba, o bien me estoy levantando. He aprendido a no quedarme aparcado en el medio. Aunque el decaimiento es un sentimiento universal, los sociólogos nos advierten contra dos cosas que lo suelen causar: el temor y el cansancio.
                                                                    Hay un proverbio inglés que dice: " No puedes quemar la vela por los dos extremos". Hoy en día hemos pasado de la vela a la energía atómica, por lo que pocos creen o siguen creyendo en ese proverbio. Ahora queremos cosas más grandes, coches mejores y vacaciones más exóticas. Para cnseguirlo empezamos nuestra jornada laboral más temprano, trabajamos más y acabamos más tarde. Luego llegamos agotados a casa y nos quedamos dormidos en frente del televisor, sin fuerzas y con un sentimiento de culpabilidad por dedicarle tan poco tiempo a la familia. Nos olvidamos que en el plan de Dios estaba la necesidad de estar un día a la semana sin trabajar, descansando y renovándonos. Debido a la vida que llevamos, la fatiga absorbe nuestra creatividad, distorsiona nuestra perspectiva, merma nuestra felicidad, socava nuestra confianza y nos agota.Muchos de los que disfrutamos de nuestros trabajos, tendemos a no tener un buen equilibrio. Como no nos marcamos límites, nos arriesgamos a quemarnos; nos "cansamos haciendo bien" ¿Cual es la solución? "Él restaura mi alma". La palabra restaurar significa descansar en lo físico y llenarse en lo espiritual. ¡Eso es lo que tienes que hacer cuando te sientas decaído!       

Culpar a otros (3)

                                                                   Culpar a otros te creará enemigos. La persona a quien culpas no te va a soltar, sino que va buscar una serie de pruebas contra ti para demostrar su inocencia  y se va a resentir contigo. Y sus amigos le defenderán y se convertirán en tus enemigos. Tus amigos también se hartarán de esa actitud quejumbrosa tuya y se distanciarán. Tu raíz de "amargura" se extenderá y contaminará a muchos, empeorando así la situación. Culpar a los demás es contagioso; tu familia se ve involucrada y sufre como consecuencia de ello. "No te hagas amigo ni compañero de gente ...malhumorada, no sea que aprendas sus malas costumbres... Haz un alto en el camino, estás contaminando a los que te rodean con tu actitud y tus deficiencias.
                                                                     Echar la culpa a otros crea adicción. La justificación que sentimos al culpar a otros acaba atrapándonos para siempre. Esta actitud manipula nuestra ira para hacer que nos sintamos bien, evadiendo responsabilidades. Poco a poco nos resulta más fácil quejarnos que resolver el problema. Y así como ocurre con las adicciones, a las que hay que alimentar más y más para conseguir la recompensa, antes de que te des cuenta te habrás convertido en un adicto en evadir culpas. Esa actitud impide el perdón; no puedes perdonar a alguien mientras lo estás juzgando y sientas que te ha ofendido. Cuando desperdicias tu tiempo y tus energías culpando a los demás, renuncias al derecho a recibir el perdón de Dios. "Si no perdonáis sus ofensas a los hombres, tampoco vuestro Padre os perdonará vuestras ofensas" .Es hora de asumir la responsabilidad por tus actos y tu vida y de recuperar la capacidad divina para responder a las situaciones.         

Culpar a otros (2)

                                                                    No hacerse responsable de sus actos fue una actitud natural para Adán y Eva, los padres de la raza humana. ¿ Y a quién tenían que culpar ? ¡ Solo a Dios !Culpar a otros fue el resultado del cambio  que experimentaron por el pecado. Al no aceptar responsabilidad por sus hechos, cambió radicalmente la relación consigo mismos, con el otro, con el entorno y hasta con Dios, Y puesto que Dios no puede hacer nada con personas que no asumen sus decisiones, los expulsó del Paraíso. ¡Qué precio tan alto tuvieron que pagar!
                                                                     He aquí dos buenos motivos para dejar esa actitud: 1) Te convierte en víctima. Cuando haces que otros sean responsables de tus circunstancias, la capacidad de cambiar las cosas reside en sus manos, lo que significa que nada va a cambiar a menos de que ellos decidan hacerlo. Haces de ellos los dueños de tu destino. La única manera de retener la capacidad de cambiar tus circunstancias es responsabilizándote de tus acciones. 2) Te deja triste y deprimido. A lo mejor insistes: 'No sabes como me hirió'. Es verdad, pero al albergar resentimiento, te sigues hiriendo a ti mismo continuamente. La Biblia dice: "...Cuidado con las raíces de amargura. Unas pocas semillas de cardos pueden estropear un jardín en poco tiempo...". Antes de que tú te des cuenta, tu perspectiva se habrá distorsionado. " Cuidado con el "síndrome de Esaú ": Cambió el regalo a que tenía derecho de por vida para satisfacer un apetito momentáneo...Esaú después se arrepintió y quiso la bendición de su padre, pero para entonces ya era demasiado tarde y sus lágrimas no iban a cambiar nada". Perdona a quien debas  perdonar, vuelve a tomar las riendas de tu vida, y acepta tu responsabilidad.    

Culpar a otros

                                                                 Cada vez somos una cultura que no asume responsabilidades; nuestras desgracias siempre son culpa de alguien. 'Soy así por culpa de ellos; ellos me hicieron así'. Pero en realidad nosotros no inventamos este juego, sino que se remonta al Huerto del Edén, cuando Adán le dijo a Dios: "La mujer que me diste...me dio del árbol y yo comí " Así pues, ¡es parte de nuestro ADN ! Afirmamos que nuestra ruptura matrimonial fué culpa del cónyugue; bebemos demasiado porque alguien nos incita; no estamos sanos por culpa de la comida rápida, entonces ¡demandémosla!Evadir la responsabilidad tal vez podrá aliviar la culpa momentaneamente, pero se convierte en un juego peligroso en el que nadie gana. Al sentenciar Jesús a muerte, Pilato dijo: "...Inocente soy yo de la sangre de este justo. Allá vosotros" Pensó que echándoles encima la responsabilidad a los judíos, evitaría incomodar a su esposa o a sus detractores y sería considerado inocente. ¡Sin embargo él era el máximo responsable!
                                                                Tienes que saber que eres responsable ante Dios de tus decisiones y de tus actos: "Él juzgara a cada uno según lo que haya hecho". Si tomas decisiones equivocadas o actuas de manera incorrecta tú será el culpable. Escribe Pablo " No os engañéis. Cada uno cosecha lo que siembra " Si otros son culpables de haberte ofendido, eso será lo que recojan. Pero tu cosecha depende de tu actitud y de tus actos. Para aliviar tu sentimiento de culpabilidad, tu desánimo y tu tensión no hay nada mejor que aceptar tu parte de responsabilidad.   

Se lo debes a ellos

                                                                     Es posible que no puedas dar a tus hijos todo lo que te gustaría ni todo lo que quieren, pero hay cuatro cosas que les debes: 1) Buena comunicación con ellos. Se dice que una pareja compró un parque infantil para una amiga que estaba esperando su sexto hijo. Un año más tarde la amiga le escribió diciendo: Gracias, por el parque, es fantástico; me siento dentro de él todas las tardes para leer, así los niños no se me pueden acercar. En serio ¿Quéd conoces acerca de tus hijos? ¿Sabes cuales son sus luchas, su música favorita, sus temores, sus sueños, quienes son sus amigos y sus héroes? Si la respuesta es "no muy bien" empieza a cambiar algunas c osas. 2) Escúchalos. Para muchos de nosotros, si le diéramos al jardín la misma atención que prestamos a nuestros hijos, ¡tendríamos un césped lleno de malas hierbas! No vas a entender a tus hijos hasta que no pases tiempo escuchando lo que dicen - y lo que no dicen - . 3) Cree en ellos. Cuando el famoso cantante de ópera Caruso era un niño, un profesor de música le dijo que no tenía ningún talento para la música. Padres, haced que vuestras voces sean las que mas oigan vuestros hijos. Ayudadles a desarrollar la confianza, la fe y la autoestima necesarias para superar los obstáculos que van a enfrentar en la vida. 4) Que vea a Dios en ti. Tres niños estaban hablando de sus padres.Dijo uno: 'Mi papá conoce al alcalde'. El segundo añadió: 'Pues mi papá conoce al gobernador'. El tercero dijo, con gran aplomo: 'Eso no es nada: ¡mi papá conoce a Dios!'.Padres ¿conoceís a Dios? Si la respuesta es negativa;¿a que estáis esperando?.  

Mata el gallo

                                                                     Se cuenta un relato muy bonito acerca de un niño de raza negra y su madre. Cuando era un muchacho, todas las mañanas era despertado, junto con todos los esclavos de la plantación, por el canto de un gallo. Antes de que despuntara el día, el sonido  inoportuno del animal se expandía por las mañanas y era la señal para él y sus compañeros de que tenían que salir de la cama e irse a los campos de algodón. El canto del gallo era el símbolo de una vida de jornadas muy largas y de trabajo agotador. Pero llegó la Declaración de Enmancipación del presidente Abraham Lincoln y con ella se puso fin a la esclavitud. A la mañana siguiente del acontecimiento, al joven le volvió a despertar el gallo. Pero ese día su madre corrió tras el animal en el corral, lo mató y lo cocinó. ¡ Y toda la familia se almorzó al despertador!. Su primer acto de libertad fue silenciar el recuerdo de su esclavitud.
                                                                   ¿Hay algún "gallo" robándote el sueño? A lo mejor tienes que afilar el cuchillo. La gran noticia de Dios es real ¡y también tu libertad!. Por el amor de Dios olvídate de tus pecados, porque cuando los sacas a relucir le ofendes.¿Te parecen palabras muy fuertes ? Entonces lee lo que Dios dice acerca de tus pecados: "Yo soy quien borro tus rebeliones por amor de mi mismo, y no me acordaré de tus pecados" Dios ha enterrado tus pecados en "lo profundo del mar" y ha puesto un letrero en la orilla que dice: "Prohibido pescar en estas aguas".
      

Puedes sobreponerte a la amargura

                                                                      A un hombre le mordió una serpiente de cascabel y lo llevaron al hospital de urgencia. Allí el paciente le preguntó al médico: ¿Es mortal la mordedura ?, a lo que el doctor respondió: ' La mordedura no, pero el veneno sí '. Las mordeduras que sufres a manos de otros son hirientes y dolorosas, pero no mortales. Las cosas que te suceden por lo general no te destruyen; pero lo que ocurre en tu interior después de eso si puede hacerlo. Como si fuera veneno, la amargura primero envenena tu mente y luego tus relaciones con los demás. Haces que vuelvas a repetir en tu mente la herida  hasta que acaba controlándote y robándote el futuro que Dios tenía planeado para ti. Aunque en realidad no tendría que ser así; tú puedes sobreponerte a la amargura. Dios dice,' Deja de ser amargo e iracundo con los demás'; y Él te dará la gracia para que cumplas lo que te pide.
                                                                         Cuando Pedro le preguntó a Jesús: "...¿Cuantas veces perdonaré a mi hermano...? ¿Hasta siete? Jesús le dijo: - No te digo hasta siete, sino aún hasta setenta veces siete" En otras palabras: "Perdona y sigue perdonando hasta que la ofensa no te duela". ¿Qué es lo que da lugar a la amargura? La ira que se ha asentado en tus pensamientos. Pero Dios quiere que cuando sientas enojo te motives a acudir a Él para recibir de su poder para resolver los problemas y evitar que se hagan permanentes. Resolver el problema te añeja de la ira, sin embargo cuando sigues fijándote en 'quién me hizo esto' la ira puede convertirse en amargura constante, haciendo de ti una persona hostil, crítica, acusadora y excesivamente severa. A lo mejor te preguntas:'¿Puedo de verdad, controlar mi ira?, la respuesta es que con la ayuda de Dios si puedes; puedes estar en control de tus reacciones y de tu comportamiento y hacer desaparecer el enojo.           

La faceta positiva de la competencia

                                                                     Decimos cosas como: "El mundo laboral es una carrera de ratas"; ' Si eres buena persona, acabas el último':' Ganar no es todo - ¡ es lo único que importa !. Todas estas afirmaciones reflejan el sentir de nuestra cultura, la cual promueve estilos de vida donde se trabaja en exceso. Esto a su vez daña gravemente la salud, divide a las familias y elimina la disciplina espiritual necesaria para tener una estrecha relación con Dios. ¿Qué tenemos que hacer entonces? ¿Evitar toda clase de competencia? ¿Retirarnos de la carrera? ¿Jubilarnos y ver pasar el mundo desde la ventana? No, esas no son las alternativas.
                                                                     Por ello: 1) Sé consciente de la clase competitividad que conduce a los celos. En el caso de Caín, la competencia con su hermano le llevó a asesinarlo. Intentó derribar a su hermano para exaltarse a sí mismo. El rey Saúl trató de matar a David cuando oyó que las multitudes cantaban: "Saúl hirió a sus miles, y David a sus diez miles" . Esas palabras hicieron que los celos, cual cáncer, crecieran en su interior. 2) Ten presente que cuando tratas de sobresalir en tu trabajo, lo haces por Cristo. Pablo escribe: "...En una carrera todos los corredores compiten, pero solo uno obtiene el premio. Corred, pues, de tal modo que lo obtengáis. Todos los deportistas se entrenan con mucha disciplina. Ellos lo hacen para obtener un premio que se echa a perder; nosotros en cambio, por uno que dura para siempre" No puede haber esfuerzos mediocres, ni debemos conformarnos con resultados mediocres: 'Corro lo más rápido que puedo hasta la meta; doy lo máximo de mí. No vivo a medias, sino que me mantengo alerta y en perfecta forma'. No se trata de ganar a otros, sino de sacara el máximo rendimiento,¡para la gloria de Dios! "Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres".          

El alto costo del pecado

                                                                     Era una simple coma, ¡pero le costó millones de dólares a la corporación Lockheed! Se cometió un error en un contrato de un cliente internacional, una coma mal puesta en un número crucial. La compañía insistió en que el fabricante cumpliera el contrato tal como se había firmado. Desafortunadamente para Lockheed, el error se cometió en una ecuación que ajustó el precio de venta, y le costó 70 millones de dólares.
                                                                      Lo mismo sucede con el pecado. Tiene un alto costo, aunque en el momento parece pequeño. Las transgresiones que parecen inofensivas pueden terminar haciendo mucho daño.  Tener unos cuantos kilos de más puede costarle a un corredor un tiempo valioso en una carrera importante. De la misma forma, una "raíz de amargura" o de odio en nuestras vidas puede producirnos un enorme daño espiritual a nosotros, a los demás y a nuestra relación con Dios.
                                                                       Por eso es sabio "temer a Dios y apartarse del mal". Si tomamos en serio a Dios, odiaremos todo pecado en nuestras vidas.
                                                                        ¿ Y tú ? ¿Estás dejando que un pecado te enrede y te retrase en tu vida?.
Confiésalo ahora mismo, o de lo contrario, el costo será mucho mas alto después. 

"Flecha" sólo escuchaba

                                                                       Manuel recibió una inesperada "carta de gratitud" por el servicio prestado a la compañía, una nota breve que concluía: "Hemos eliminado su posición".
                                                                       Después de que Manuel pasara meses  infructuosos buscando trabajo, su frustación finalmente le afectó. Airado gritó a Dios: "¿Por qué me hiciste esto? ¿No te importa?" Continuó su perorata hasta que notó a su perro Flecha agachado junto a su silla. Recobró la compostura y dijo: "Ven aquí perrito.Deberías de alegrarte de ser perro. Al menos no te pueden despedir de ser el mejor amigo del hombre".Mientras expresaba su lamento y conversaba con Flecha, su amargura desapareció.
                                                                         El escritor que contó la historia, escribió: Podrías pensar que el alivio le vino de todas las cosas que le dijo a Dios, y en parte fue así. Pero Flecha desempeñó un papel importante también ....(Ella) no discutió ni dio soluciones, ni dio consejos. Sólo se limitó a escuchar moviendo la cola y lamiendo la manos de su amo".
                                                                          A veces necesitamos simplemente "llorar con los que lloran". Puede ser que lo que ellos necesitan sea que les escuchemos para poder escuchar lo que Dios les está diciendo.   

                                                                            

La competencia inexorable de la vida

                                                                   A pesar de los avances tecnológicos, el nivel de frustación de la gente parece cada vez mayor. El meollo del asunto es que la naturaleza humana pecaminosa no ha cambiado.
                                                                    Hace casi 3000 años, Salomón hizo tres reflexivas observaciones sobre la competencia inexorable de la vida en su época. Primero, dijo que la motivación que había en gran parte de la diligencia humana era sobrepasar a los demás, y en esta situación nadie gana.
                                                                     Segundo, los que se salen de esa competencia se vuelven haraganes e improductivos. Esta clase de ocio es necia y autodestructiva.
                                                                     Tercero, Salomón dijo que la gente que se obsesionaba tanto con ganar dinero que no cultivaba relaciones sanas.Esto la hacía ir por la vida sin propósito ni significación, nunca satisfecha con aquello por lo que había trabajado.
                                                                      Recuerda:" Más vale un puño lleno de descanso, que ambos puños llenos con trabajo y aflicción de espíritu" Si deseas evitar la avaricia compulsiva o el escapismo autodestructor, pon a Dios en el centro de tu vida y dá gracias por lo que Él te ha dado . Así triunfarás en la competencia inexorable de la vida.
                                                         

Lo tengo todo

                                                                     La linea aérea había destrozado el equipaje de Debbie.Luego desapareció su cartera. En vez de entrar al aeropuerto por un pasillo cerrado, salió del avión tropezando con la copiosa lluvia.Estaba empapada, lejos de su casa, sin dinero, ni identificación ni ropas secas.
                                                                     En circunstancias normales, Debbie se habría puesto furiosa, pero esa noche no importaba. Acababa de sobrevivir al accidente aéreo del vuelo 1420 en Little Rock, Arkansas."Cuando salí de aquel avión -dijo Debbie - salí sin nada.Luego me detuve y pensé: Lo tengo todo " De repente se dio cuenta de que su vida era más importante que todo lo que había perdido.
                                                                      A veces se necesita un dramático giro en los acontecimientos para alterar nuestra perspectiva. Eso le sucedió a Saulo de Tarso. Lo que Saulo mas atesoraba en la vida era la reputación de "hombre justo" que tanto le costó ganar. Pero cuando conoció a Cristo en el camino de Damasco, toda su perspectiva cambió. Más tarde escribió: "Pero cuantas cosas eran para mí ganancia, las he estimado como pérdida..."
                                                                      Cuando no nos queda más que Cristo, descubrimos que Cristo es suficiente.   

No te apresures en las reloaciones (2)

                                                                    Todos queremos ser amados y apreciados por quienes somos. Y cuando esto no sucede en el tiempo que esperábamos, existe la tentación de meterse en una nueva relación, con el anhelo de que esta vez si funcione . Un escritor dice: "No existe el Príncipe Azul que te seduzca y te haga sentirte bien, Aunque la primera parte del cuento parece ser muy buena, la Bella Durmiente se despierta para comprobar que su príncipe es una rana... No esperes que nadie te dé lo que únicamente tu Padre celestial puede darte. Lo que aportan los mortales, aún con las mejores intenciones, nunca podrá compararse con eso. Cuando pones tus esperanzas y tus ojos en alguien, acabarás desilusionado...Cuando entregas tu alma con el fin de alcanzar lo inalcanzable... el precio es muy alto y existe un gran peligro. No dejes que ningún deseo obsesivo te conduzca por el sendero de la desesperación...porque la obsesión es algo poderoso. Esta alimenta las fantasías y te hace comportar locamente...No encontrarás amor hasta que te ames y respetes a ti mismo lo suficiente para no tener que buscar tu valía en otras cosas  u otras personas".
                                                                      Cierto día Jesús se encontró con una mujer que se había casado cinco veces y en ese momento estaba con otro hombre. Entendiendo Jesús que la necesidad de la mujer no era un nuevo hombre sino una relación con Dios, le dijo: "...El que bebiere del agua que yo le daré, no tendrá sed jamás..." Jesús vio su necesidad más allás de su pecado, y le devolvió su valía, En resumen: solamente el agua que te da Jesús podrá calmar la sed de tu alma.