El rey Amasías hizo lo recto,pero no lo hizo 'de todo corazón'. Tú también puedes hacer lo recto y no ser bendecido. ¿Por qué? Porque lo hiciste con actitud errónea. Tomemos por ejemplo el tema de dar. El apóstol Pablo escribe: "Tened en cuenta: "Quien siembra con miseria, miseria cosechará' Dé cada uno según le dicte su conciencia, pero no a regañadientes o por compromiso, pues Dios ama a quien da con alegría. Dios, por su parte,tiene poder para colmaros de bendiciones de modo que, siempre y en cualquier circunstancia, tengáis lo necesario y hasta os sobre para que podáisn hacer toda clase de buenas obras. Así dice la Escritura; Repartió con largueza a los necesitados, su generosidad permanece para siempre. El que propoporciona semilla al sembrador y pan para la compra, os proporcionará también y hará que se multiplique vuestra simiente y que crezca el fruto de vuestra generosidad. Colmados así de riqueza, podréis repartir con una total libertad que, por mediación mía, redunde en acción de gracias a Dios
Destaquemos dos cosas: 1) Tu grado de dar determina tu grado de recibir, 2) Tu actitud al dar determina la abundancia de lo que recibes.Así que cuando consideres lo que vas a dar, ten en cuenta la bondad de Dios para tí, decide la cantidad y hazlo con alegría de corazón. ¡La actitud es lo que cuenta!..
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