jueves, 7 de mayo de 2015

De todo corazón

                                                  Abraham provenía de una tierra donde se adoraba a ídolos. Fue el primero de su familia en servir al Dios verdadero. Para ello, tuvo que superar su transfondo, su formación y las opiniones de sus vecinos. En obediencia a un Dios que no conocía del todo, abandonó lo familiar para ir a un destino incierto.¿Tuvo fallos y debilidades? Claro; busca a alguien que no los tenga. ¿Cometió errores' Si, ¡y  gordos!. Pero lo que impresiona es lo que Dios hace por y a través de un hombre o mujer que confíe, descanse y se mantenga firme en Él. Hay una frase que resume como sirvió Abraham a Dios: "De todo corazón".
                                                    Dios hizo un pacto con Abraham prometiéndole fama, salud, larga vida, protección y un hijo milagro a su avanzada edad. Y las bendiciones a Abraham también son promesas para ti cuando aceptas a Jesús como tu Señor y Salvador. Habría sido fácil seguir el rastro de Abraham porque allí donde iba, siempre construía un altar a Dios. Constan varios en las Escrituras
y el más famoso es en el que colocó a su hijo Isaac- No habrá nada ni nadie  que Abraham amara más que a Dios. Y lo que el Señor hizo por Abraham, lo hará por ti si Le sirves incondicionalmente. Hará que la gente te mire y te diga: "Este hombre, esa mujer, sirven a un Dios que de verdad se interesa por ellos; nadie más podrá hacer que les vaya así en la vida". La bendición de Dios es lo que consigues a cambio de una devoción sin límites. Visto así, el precio que hay que pagar es bastante bajo. 

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