lunes, 10 de agosto de 2015

Para las esposas

                                                         "Las mujeres estén sometidas a sus propios maridos"  Algunos usan este versículo para tratar a sus mujeres como esclavas, y les roban la voz y el derecho que tienen a ser líderes. ¡Lee la Biblia! Débora dirigió a la nación de Israel. La profetisa Huida habló la Palabra de Dios a reyes. Leamos el versículo de nuevo "Las mujeres estén sometidas a sus propios maridos..."  Como esposa has sido llamada a someterte a tu esposo, no a todos los hombres. A los ojos de Dios las mujeres y los hombres son iguales. Pablo no está hablando de tu persona, está hablando de tu papel en el hogar. Como ser humano, un general no es más importante que un sargento. Pero para que un ejército funcione bien tiene que haber  un respeto y una cadena de mando donde unos dirigen y otros siguen. Dios no quiere que te sientas oprimida bajo la autoridad del liderazgo de tu esposo, sino protegida en la seguridad que eso te confiere.
                                                             Puedes sobresalir en tu carrera pero al mismo tiempo querer ser cuidada, amada y protegida por tu esposo. Bien entendido, el amor y liderazgo de tu esposo no disminuyen tus facultades, simplemente te hacen mantener el equilibrio para que no pierdas la ternura y la feminidad . Una adevertencia: si buscas que tu marido sea "tu todo" ¡cuidado!. Dios es el único que puede ser tu todo. Si esperas perfección de tu esposo, estás pidiendo algo de alguien que tu misma no puedes dar . Este es el plan de Dios: "Ella participa por igual del regalo de la nueva vida que Dios (os) ha dado (Tratadla) como es debido, para que nada estorbe (vuestras) relaciones..."

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