lunes, 6 de octubre de 2014

Paz en medio de la desesperación

                                                  El 11 de Septiembre del 2001 los estadounidenses se despertaron con escenas de horror que quedarían grabadas en la memoria del país para siempre, cuyas ondas expansivas se extendieron al resto del mundo con el mensaje de que las cosas nunca volverían a ser igual. Con ojos adormilados las personas vieron en sus televisores cómo se derrumbaban las Torres Gemelas y atrapaban a miles de personas inocentes, así como el atentado mortal al Pentágono y el terrible destino de otro avión de pasajeros que se estrellaba en un campo de Pensilvania. Inesperados, veloces y violentos, estos ataques consternaron a los ciudadanos y revelaron una nueva y desconcertante realidad; la proliferación del terrorismo mundial. Hoy en día, la amenaza de ataques suicidas y atentados con armas biológicas o químicas  sigue siendo real en este mundo altamente tecnológico y en nuestras ciudades ahora mucho mas conscientes y vigilantes de la seguridad, en los aeropuertos y las estaciones de trenes y autobuses.
                                                   Hace varios siglos el rey David se enfrentó a la amenaza de conspiración por parte de sus aliados y de sus enemigos. Creyéndose abandonado, solo y vulnerable, exclamó: "...El terror me rodea" .Aunque era rey, guerrero y derribador de gigantes, David sintió de forma palpable el terror de la situación. Atemorizado centró sus pensamientos y su corazón en la fuente de su verdadera protección: "Pero yo confío en Ti, oh Señor..." Estaba asustado, pero decidió confiar en Dios. Y esa decisión le cambió la perspectiva: "Mi futuro está en tus manos..." Su larga lista de temores dio paso a la fe: "Que grande es la bondad que has reservado para los que te temen.
La derramas en abundancia sobre los que acuden a ti en busca de protección..." En Jesús hallarás paz en medio del terror.

No hay comentarios:

Publicar un comentario