viernes, 20 de mayo de 2016

Ámate

                                                    Dios te ama tanto que dió a su único hijo para salvarte. '¿Para salvarme de qué?' 1) Para salvarte de recorrer esta vida perdido, sin dirección, alegría ni satisfacción. 2) Para salvarte de pasar la vida futura perdido y sin la felicidad del cielo que Dios quiere compartir contigo. Dios te tiene en tan alta estima que cada vez que te empeñas en menospreciarte rechazas Su opinión de ti. Y al no estar de acuerdo con Dios, te estás equiparando con Él, o lo que es peor,haces primar tu opinión sobre la Suya. Quizás nunca antes te lo hayas planteado así. Una actriz y cantante,
que nació siendo negra y pobre en una sociedad segregada, conoció a Cristo y cobró su verdadera estima. Ministró a grandes multitudes en las campañas evangelísticas de un pastor muy conocido. Con una sonrisa que te derretía el corazón, decía siempre al público: "Dios me hizo y Dios no hace basura".
                                                      Cuando no te amas, es imposible amar a otros  o aceptar que te amen. Te vuelves experto en hacer oidos sordos a cumplidos y en aceptar las críticas, porque estas confirmen la opinión negativa que tienes de ti mismo. Por consiguiente te distrancias de la gente y acabas solo sin saber por qué. Quizá tus padres te defraudaron o tu cónyuge te haya traicionado. Pueder ser que te sientas como objeto estropeado y busques una escapatoria en adicciones, aventuras extramaritales o en estilos de vida donde lo único que cuenta son los logros. Pero al final eso no funciona. Cuando reconozcas que Dios te ama incondicionalmente y decidas amarte a ti mismo, tendrás amor para dar a otros. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario