^Pablo escribió:"En cuanto a mi, muy poco temo el ser juzgado por vosotros...el que me juzga es el Señor" ¿Te imaginas tener las críticas 'en muy poco'? ¿O ser libre de la necesidad de impresionar a la gente? ¿O que tu autoestima ya no dependa de lo próspero, inteligente o atractivo que te consideren los demás?. Piensa como sería sentir amor genuino por alguien que expresa no estar de acuerdo contigo. ¿Acaso es posible vivir así? Lo es, con la ayuda de Dios.. Un pastor escribió: "Hace años queria dirigir cierto ministerio. Cuando no salí elegido, me enfadé. Por supuesto no se me notó. No es que no amara a Dios, sino que quería servirme a mí más que a Él.Al negarme el puesto Dios me estaba corrigiendo una actitud que habría destruido cualquier ministerio futuro. Cuando representas a Dios de forma tan visible, es casi imposible que los demás detecten que eres un farsante...salvo Dios.
¿Has oído hablar de la adicción a la aprobación?. Entre sus síntomas está el vivir con miedo a lo que piensen los demás, sentirse herido facilmente por los comentarios de alguien, una sensación constante de no ser suficientemente bueno y querer impresionar de continuo a personas importantes . Y como los adictos, estarás dispuesto a todo por conseguir el objeto de tu deseo. Alguien escribió: Muchas de mis preocupaciones diarias indican que pertenezco mas al mundo (que a Dios). Me enfado por una pequeña crítica...un leve halago me levanta el ánimo....Soy como un bote en el océano, completamente a merced de las olas". ¿Es este un asunto por el que necesitas orar hoy?.
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