martes, 15 de noviembre de 2022

Busca a Dios, ¡no a las cosas!

                  Dios no niega "nada bueno....a los que andan en integridad" Pero es importante reconocerlo a Él como la fuente de todas las bendiciones, ¡y en eso nos quedamos cortos! Asumámoslo, "mas" no siempre  significa "mejor". De hecho, dependes menos de Dios cuanto más dependes de las cosas.Por eso la Ley de Levítico disuadia la formación de imperios. En el Antiguo Testamento, a los pobres se les hacían los préstamos sin intereses; se anulaban las deudas pendientes a los siete años; se liberaba a los esclavos y se les daban medios para empezar de nuevo; los familiares rescataban las tierras pérdidas y la propiedad vendida, perdida o no rescatada volvía a su dueño original. ¿Por qué? Porque Dios quería que su puebñlo dependeria de Él, no de las pertenencias. Les advirtió: "Cuando se hayan multiplicado....tus riquezas....No se te ocurra pensar: 'Esta riqueza es fruto de mi poder y...fuerza'...Recuerda al Señor porque...te da el poder para producir esa riqueza....".

                      Los principios de Dios no han cambiado.Alguien señala que hacerte una lista de cosas que debes y no debes hacer es como tener a alguien dándote instrucciones. Si la persona te da un mapa, te guías por él, pero cuando sigues a la persona, te centras en ella. La Biblia no dice que Dios recompense a los que buscan cosas "diligentemente", sino que Él "recompensa a los que le buscan" Conclusión: si dependes de cualquier otra cosa que no sea Dios, nunca triunfarás. "No se preocupen por todo eso...su Padre celestial ya conoce todas sus necesidades...y Él les dará todo lo que necesiten". 

No hay comentarios:

Publicar un comentario