martes, 15 de octubre de 2013

Seguridad en ti mismo (2)

                                                                     No confundas ser competente con estar seguro de ti mismo; lo primero se desprende de tus capacidades, lo segundo de conocer tu identidad  en Cristo, de saber que estás "...completo con él..."
Un autor comenta: "Lo primero que aprendí sobre la seguridad en mí mismo, es que yo no la tenía...Llevaba una capa de arrogancia que ocultaba un profundo temor. Todos esos años de triunfo a los ojos del mundo  me habían dejado con un miedo terrible a equivocarme. El éxito en el mundo demanda arriesgarse cada vez más para alcanzar nuevas cotas. El éxito espiritual, en cambio, implica deshacerse  de los logros personales y dejar que Dios actúe. Me aterrorizaba el fracaso
y tampoco encontré el éxito en la falsa seguridad de mí mismo que sabía estaba basada en mis capacidades...La realidad sin embargo, es que si de repente te encuentran un bulto en el pecho, o tu cónyuge te dice que nunca te ha amado, o te despiden del trabajo, o tu hijo está gravemente enfermo, ninguna de las tácticas empleadas ni las destrezas adquiridas te servirán de nada...La Biblia dice: "...Nadie tenga un concepto de sí más alto que el que debe de tener..." . Una vez que te das cuenta de que no eres perfecto ...podrás respirar hondo y empezar la tarea de ser lo bastante bueno... Cuando tu seguridad y confianza se derivan de conocer a Dios, las circunstancias no podrán sacudirte. Entonces...tendrás mucha más confianza  en ti mismo, paz, contentamiento y valentía."
                                                                         Ya es hora de que te quites la presión de tener que actuar como si fueras Dios y pretender tener todas las respuestas. " Tenemos habilidades diferentes, según la gracia que se nos ha dado..."    

No hay comentarios:

Publicar un comentario