La gente a tu alrededor está buscando amor y aceptación, y tú tienes más capacidad de lo que piensas para dárselos. ¿Tienes alguna idea de cuántas personas nunca escuchan una palabra de aprecio? Estimamos que no la necesitan. Puede que no muestren ninguna apreciación, pero la necesitan. y cuando la das, retorna a ti.
Séneca, el hombre de Estado romano, dijo: "Debemos dar del mismo modo en que nos gusta recibir: alegremente, y sin titubear; no hay gracia en un beneficio que "se pega a los dedos". Si quieres sentirte apreciado, procura hacer que los demás se sientan apreciados. Si deseas tener éxito, entonces ayuda a alguien a tener éxito. Si valoras los cumplidos, pues bien, comienza a elogiar a otros. Pablo dijo: "...según tengamos oportunidad, hagamos bien a todos..." Las personas no adivinan lo que hay en tu mente; cuando piensas algo bueno acerca de ellas, ¡díselo!, y no esperes a recibir una señal del Cielo.
Dios quiere usarte en medio de donde te encuentres todos los días. Cuando aprendas a hacerlo, Él ampliará tu territorio. Las "semillas" de amor que "siembres" en la vida de alguien, siempre generaran "cosecha" que obtendrás en la tuya. Alguien dijo: !"Da al mundo lo mejor que tienes, y lo mejor volverá a "ti". Dios te hizo para ser bendición, no solo para recibir bendiciones.
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