viernes, 13 de enero de 2017

No olvides darle gracias a Dios

                                                  "Dos niños vestidos con abrigos harapientos que les quedaban grandes se refugiaron en la contrapuerta. '¿Tiene algún periódico viejo, señora?' Yo andaba tan ocupada que iba a contestar que no, hasta que vi sus pies, calzados con sencillas sandalias empapadas de aguanieve.'Entrad y os haré un chocolate'. No tuvimos ninguna conversación. Sus sandalias mojadas dejaron huellas en el suelo de piedra al lado de la chimenea. Les serví chocolate y tostadas con mermelada para reconfortarlos del frio de afuera. Después volví a la cocina para continuar con mi presupuesto familiar. El silencio que provenía de la habitación de al lado me llamaba la atención, así que miré en ella. La niñita sostenía la taza vacía en sus manos y la observaba.
                                                    El niño me preguntó: 'Señora, ¿es usted rica?' Miré ñas fundas desgastadas. '¿Si soy rica? ¡Claro que no!' La niña colocó cuidadosamente la taza en su plato. 'Sus tazas hacen juego con sus platos'. Su voz resultaba mayor a causa de un hambre que no provenía del estómago. Y se marcharon, sujetando el montón de periódicos contra el viento, sin darme las gracias. Pero no fue necesario, pues habían hecho mucho más que eso. Tengo tazas y plato de cerámica azules muy sencillos, pero que hacen juego. Tengo unas patatas en salsa para comer, un techo que cubre nuestras cabezas, un marido con un trabajo estable....Tengo todas esas cosas. Moví las sillas de la chimenea y ordené el salón. Las huellas de barro de las sandalias de los niños seguían húmedas en el suelo. Las dejé sin limpiar. ¡Las quería dejar ahí en caso de que alguna vez me olvide de lo rica que soy!". El mensaje de hoy para ti es:
no olvides darle las gracias a Dios.      

No hay comentarios:

Publicar un comentario