Es probable que tengas diferentes dones, pero debes averiguar cuál es el más destacado y edificar tu vida en base a él. David sabía en su interior que era algo más que un pastor, era un rey en potencia; matar a Goliat fue la oportunidad de demostrarlo. Si no se hubiera dado cuenta de eso se habría vuelto a cuidar ovejas.¿Qué te ciega para que no descubras tu don principal?.
1) Centrarte en tus faltas.En vez de fijarnos en nuestros puntos fuertes, escuchamos a nuestros detractores y prestamos atención a las cualidades que mas nos desaniman. Ten cuidado; las compañías que frecuentes o bien te levantarán o te rebajarán, sobre todo si te rodeas de personas a quienes les molesten tus éxitos, porque estos les recuerdan sus carencias. 2) Envidiar los dones de otros. Es bueno apreciar a los demás, pero no trates de emularlos. En lugar de vivir a la sombra de alguien, edifica sobre sus cualidades positivas y aprende de su sabiduría. Sé un Eliseo: pide a Dios una doble
porción de las cualidades de tu maestro. Las personas extraordinarias son gente normal y corriente que ha identificado su don más destacado y lo ha puesto en acción.
Pablo menciona siete dones diferentes: "Tenemos, pues, diferentes dones, según la gracia que nos es dada: el que tiene don de profecía, úselo conforme a la medida de la fe; el del servicio, en servir; el que enseña, en la enseñanza; el que exhorta, en la exhortación; el que reparte, con generosidad: el que preside, con solicitud; el que hace misericordia, con alegría"
¿Cual es tu don principal? Identifícalo, desarróllalo y dedícalo al servicio supremo de Dios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario