lunes, 5 de julio de 2021

Capeando el temporal financiero (1)

                               Al recordar una conversación reciente, alguien dijo:"Un amigo mio comenta: 'Me da pánico ir a trabajar. Todos esos despidos son deprimentes; sigo pensando que yo voy a ser el siguiente. Tengo mucho trabajo, y mis clientes aprecian lo que hago, pero empiezo a preocuparme y cada vez me siento peor.' La preocupación es un mal que nos abruma. Todos conocemos a alguien que está pasando por dificultades económicas: amigos, amigos de amigos, miembros de la iglesia, vecinos, padres de los amigos de nuestros hijos. En unos casos es una jubilación anticipada, en otros, la necesidad de cambiarse a una casa mas pequeña, otros es una indemnización laboral; todos ellos son casos reales que se suman a las estadísticas, y ese miedo te va consumiendo y hace que cada día sea una agonía".

                                Es muy probable que tu mismo estés sufriendo algún tipo de desánimo-flechas diarias de frustración que te van pinchando y robándote el gozo. Satanás es como un terrorista que se especializa en guerrilla. Él sabe bien que llevaría todas las de perder si se enfrentara a las fuerzas del cielo, así que su estrategia es atacar a los creyentes. La pregunta es: ¿Cómo vas a mantenerte firme cuando todo alrededor se está zarandeando? Para empezar. Isaías dice: "Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en tí persevera..." Si Moisés se hubiera fijado en sus circunstancias, nunca habría tenido el temple de ponerse entre el Mar Rojo y los egipcios. Su seguridad proveía de saber que estaba donde Dios quería que estuviese. Tener paz no es una meta en sí misma, sino la consecuencia de saber: "¡Cuán grande es tu bondad, que has guardado para los que te temen, que has mostrado a los que esperan en ti, delante de los hijos de los hombres!".  

No hay comentarios:

Publicar un comentario