miércoles, 11 de noviembre de 2015

Espera

                                                           Cuando miramos hacia atrás nos damos cuenta de que: 1) Dios tenía algo mejor para nosotros, 2) No éramos lo bastante maduros en ese momento para manejar lo que estábamos pidiendo. Solemos pensar que estamos listos pero Dios sabe cuándo lo estamos. Mas de 40 veces en la Biblia  se nos pide que: "esperemos en el Señor". Aprender a esperar es una prueba de madurez . Alguien escribe: "Aplazar la gratificación es un proceso de graduar el dolor y el placer de la vida, de tal manera que podamos incrementar el placer cuando experimentamos primero el dolor y lo superamos ...Es la única forma correcta de vivir.
                                                             El hecho de esperar nos obliga a aceptar que no estamos en control. Y nos hace más humildes, algo tan necesario. Considera al trapecista: durante un segundo- que debe parecerle una eternidad-esta suspendido en la nada. No pude volver atrás y todavía no lo ha agarrado el otro trapecista. Tiene que esperar en absoluta confianza. Tal vez estás ahora en ese punto de tu vida . Has soltado lo que Dios te pidió que dejaras pero no puedes sentir su mano agarrándote todavía. Moisés esperó ochenta años, un ministerio que duró cuarenta, es decir, se pasó dos tercios de la vida capacitándose. Jesús pasó treinta años preparándose para un ministerio que duraría tres años y medio. Desde la perspectiva divina, tu vida no se mide por los años sino por la efectividad y la influencia que tienes en Su reino. Por lo tanto espera con buena actitud, el Señor no te decepcionará.       

No hay comentarios:

Publicar un comentario