Escribe un Pastor: "Podría haber hecho cientos de test para averiguar mis dones y capacidades cuando era joven, pero nunca hubiera descubierto que era apto para enseñar, porque nunca lo había hecho. Solamente después de aceptar oportunidades de hablar en público, vi los resultados, recibí confirmación de otros y me di cuenta de que Dios me había capacitado para eso. A menos de que estés dispuesto a implicarte en algo nunca sabrás para lo que eres bueno. Claro que cometerás errores, y alguno de ellos te desanimarán tanto que querrás abandonar y no intentarlo de nuevo. Pero si aprendes de tus errores no solamente descubrirás el llamado de Dios sino que madurarás y te capacitarás para la tarea.
Escribe Pablo: "Presta mucha atención a tu propio trabajo, porque entonces obtendrás la satisfacción de haber hecho bien tu labor y no tendrás que compararte con nadie. Pues cada uno es responsable de su propia conducta" Luego añade: "No nos cansemos, pues de hacer bien, porque a su tiempo segaremos, si no desmayamos. Así que según tengamos oportunidad, hagamos bien a todos, y especialmente a los de la familia de la fe". En este día considera tu vida y haz que esta tenga trascendencia. Una de las palabras más tristes del mundo se encuentra en una lápida que dice: "Cuando me tocó morir me di cuenta de que no había vivido". ¡Que no se diga esto de ti!.
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