jueves, 1 de noviembre de 2012

Dedicate a lo que Dios te ha llamado

                                                          Nadie es bueno en todo, ni nadie tiene el llamado a hacerlo todo. Dios nos ha dado a cada uno papeles determinados en la vida. Pablo entendió que su función no era tratar de abarcar todo ni agradar a todo el mundo. Nuestro propósito debe ser operar "...dentro de la medida de la esfera que Dios nos señaló como limite..." Según la definición del éxito, solo podrás triunfar haciendo eso.
Las personas intentarán robarte el gozo,haciendo que te compares con otros o que te conformes a sus expectativas. ¡No caigas en la trampa! Siempre vas a encontrar a alguien que parece estar haciendo las cosas mejor que tú, y eso puede desalentarte. O por el contrario, verás a personas con menos éxito que tú y te volverás engreido. Ninguno de los dos caso te conviene.
                                                           "Presta mucha atención tu propio trabajo, porque entonces obtendrás la satisfacción de haber hecho bien tu labor y no tendrás que compararte con nadie" Siempre habrá personas que no entiendan el papel que Dios te ha adjudicado, o que no estén de a cuerdo con el mismo. No importa, no dejes que eso te obstruya el camino. "Sé un buen obrero, alguien que no tiene de qué avergonzarse..." Alguien escribió; " Si mi vida es infructuosa, no importa quien me alabe. Y si es fructuosa no importa quien me critique." Por lo tanto, ¡dedicate a lo que Dios te ha llamado!    

No hay comentarios:

Publicar un comentario