"Él restaura mi alma..." David dijo: "El Señor es mi pastor, nada me faltará. En lugares de verdes pastos me hace descansar; junto a aguas de reposo me conduce . Él restaura mi alma..." Hoy en día en los motores de los coches todo está informatizado, y se enciende una luz en el salpicadero para avisarte de que algo está mal y que tienes que revisarlo. Tu alma hace eso mismo, pero tienes que prestarle atención a los avisos. No esperes hasta que haya un colapso espiritual, moral, emocional o en tus relaciones antes de detenerte y prestarle atención. Cuando la sed de tu alma no esté satisfecha y sus necesidades no estén suplidas, esta buscará aliviarse de otra manera, a veces de modos que te perjudiquen.
Tienes que saber cuando decir "basta". Muchos no tomamos descansos que nos permitan "restaurar el alma" porque estamos atrapados en la culpabilidad, creyendo que hacer una pausa sería irresponsable. O quizás temamos quedarnos rezagados si nos tomamos un minuto para nosotros. Una de las cosas más díficiles de lograr en la vida no es triunfar sino conseguir un equilibrio. Así que cuando te planteas los objetivos y estés en la carrera por alcanzarlos, no te olvides del alma. Hasta el mismo Dios descansó. Si ´Él lo hizo, tu mucho más necesitas hacerlo. El beneficio del descanso es lo que te permite disfrutar del camino de la vida y no solo del destino. Y cuidado, porque si optas voluntariamente, por caminar en el parque, tal vez acabes en el hospital por necesidad. Cuando Dios, "en lugares de verdes pastos te haré descansar " disfrútalos. Cuando, "junto a aguas de reposo te conduce" es para refrescarte y restaurarte. Por lo tanto cuida de tu alma.
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