miércoles, 18 de abril de 2018

La actitud del desierto

                                                       Tras pasar la mitad de sus vidas en el desierto, los israelitas culpaban a sus enemigos, perola causa fue su propia actitud. Porque Dios "...estuvo disgustado...no entrarían en su reposo... a causa de su incredulidad..." Su actitud vacilante quejica que echaba la culpa a otros, les mantuvo atascados en el desierto; y hará lo mismo contigo. Eso empieza cuando te lamentas de ti mismo pensando: "Si hubiera nacido en otra familia, si tuviera un trabajo mejor pagado, un cónyuge más espiritual, etc., esto no sucedería" Y ahí comienza una espiral que te lleva hacia abajo a una verdadera orgía de lamentaciones donde todo el mundo es culpable de tus problemas. La verdad es que , en el 99% de las veces, la solución empieza con un cambio de actitud, ¡en ti!.
                                                        Otra actitud del desierto que te mantiene obstruido es insistir en hacer todo a tu manera. La Tierra Prometida pero sin llegar a alcanzarla.Ofrecer a Dios un sacrificio antes de ir a la batalla era el camino hacia la victoria. Solo había un problema: El profeta Samuel era el único cualificado para ofrecer tal sacrificio. Sin embargo el orgullo y la tozudez llevaron al rey Saúl a pensar que él también podía hacerlo. Como resultado perdió su vida e Israel sufrió la derrota. Samuel le dijo Saúl : "...porque rechazaste la palabra  del Señor...el Señor te ha rechazado para que no seas rey..." Entiende esto: no tienes que hacer nada para ganarte el amor de Dios, pero debes obedecerle si quieres recibir sus bendiciones. Por lo tanto, ¿qué te ha dicho Él que hagas? Si quieres ganar tus batallas y tener éxito en tus cometidos; ¡empieza a hacerlo!.   

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