Hay un principio en la Biblia que tienes que aprender si quieres disfrutar de lo mejor de Dios en tu vida: Serás bendecido si te "pegas" a los bendecidos de Dios. Nos dice la Palabra: "El que anda entre sabios será sabio..." La historia de Israel antes de entrar en la Tierra Prometida nos enseña que podemos estar en compañía de personas como Josué y Caleb, quienes poseyeron la tierra, o de otros, como los diez espías, quienes pensaron que era un cometido imposible y murieron en el desierto. Cuando José entró a trabajar para Potifar, fué fuente de bendición para su casa. Cuando fue a vivir en el Palacio del Faraón, toda la nación prosperó. Cuando Jacob quiso volver a casa y a su parentela, Labán, su suegro le dijo: "...Quédate; he experimentado que el Señor me ha bendecido por tu causa".
La iglesia de Filipos colaboró durante mucho tiempo con Pablo en la extensión del Evangelio. Los filipenses lo apoyaron financieramente y él los ministró espiritualmente. Y el apóstol escribe: "Siempre al acordarme de vosotros, doy gracias dee todo corazón a mi Dios; y os tengo presentes en mis oraciones...desde el principio y hasta el día de hoy, habeís cooperado en el anuncio del Evangelio" ¿Y cyal fue la recompensa de los filipenses? Según Pablo: "...Todos vosotros sois partícipes conmigo de la gracia"La palabra "gracia" significa "todo lo que necesitéis en cualquier situación que enfrentéis". ¡Qué maravilloso! Pablo la recibió de Jesús y los filipenses la recibieron de Pablo. Aprende a reconocer a aquellos que caminan en la bendición de Dios y acércate lo más que puedss a ellos, porque serás bendecido al "pegarte" a ellos.
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