Jesús dijo: "...Os elegí a vosotros y os he puesto para que vayáis y llevéis fruto y vuestro fruto permamezca..." . Dios se ha propuesto dos cosas con nosotros: Primero, que tengamos mayor éxito. Segumdo, que dejemos un legado de éxito. Y hatá lo que sea necesario para que así suceda, Justo cuando nos sentimos más cómodos, porque hemos alcanzado cierto grado de progreso, el Señor coje las tijeras de podar y empieza a recortar todas esas cosas a los que nos aferramos. El problema es que nos conformamos con menos de lo que Dios quiere para nosotros. Cuando Jesús dijo: "Sin mí, nada podéis hacer..." , estaba enseñándonos que cuando nos rodeamos de las demandas y las pautas de los demás, podemos acabar agotados espiritualmemte. Y cuando llegamos a ese punto, empezamos a operar con la energía de la carne.
Alguien escribió: No confundamos trabajo y fruto. Podemos hacer muchas cosas para Cristo, las cuales representan necesariamente el fruto de la vida celestial". Jesús quiere un "fruto que permanezca" . es decir, un éxito perdurable. Padres, Dios no os dio los hijos para que los perdáis en manos del enemigo. Pablo afirmó que la que veía en Timoteo lo había observado primero en su madre y en su abuela, ambas casadas con gentiles. ¿Cómo lo hicieron?. Permanecieron conectadas a la Viña y pudieron triunfar en medio de un ambiente hostil. Hombre o mujer de negocios, Dios no quiere que te conformes con el éxito temporal; Dios te prospera para que tu puedas extender Su reino. No hay escasez de recursos. Dios solo necesita personas a quien pueda confiárselos. Por consiguiente, ora: 'Señor, haz de mi un triunfador, pero dame un éxito que perdure.
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