martes, 23 de julio de 2024

Vivos, inmortales ¡y como Jesús!

                            Se cuenta la historia de un niño de nueve años que sufría síndrome de Down. En la escuela dominical se reían de él los demás niños por ser diferente. El domingo antes de Pascua de Resurrección , el maestro dio a cada uno de los alumnos un huevo de plástico y les pidió que buscaran símbolos de una nueva vida, co0mo semillas u hojas, y que los colocaran dentro, La idea era abrir  los huevos el Domingo de Resurrección  y explicar lo que habían encontrado. Para la siguiente reunión, los niños había recogido todo tipo de cosas como flores, mariposas y piedras. Pero cuando el maestro abrió el huevo del chico con síndrome de Down estaba vacío. Un alumno protestó: "No es justo; ¡no ha hecho bien la tarea!" Pero el chiquillo tiró de la manga del maestro y dijo: "Si que la he hecho bien. Está vacío porque la tumba está vacía. Por eso es que tenemos vida nueva". Los otros niños de la clase suspiraron con asombro y desde entonces, el niño gozó de mucho mayor respeto y fue parte del grupo.

                               Sin embargo su familia sabía que su tiempo en esta tierra era corto. Demasiados problemas de salud para un cuerpo tan pequeño, y ese verano  murió. Enfrentando la realidad de la muerte los niños de ocho años que conformaban aquella clase caminaron hacia el altar, pero no con flores. Junto con su maestro, cada uno colocó un huevo de plástico vacío sobre el pequeño ataúd del amigo. ¿Por qué es tan importante la resurrección  de Jesús?. Por dos razones 1) Su resurrección garantiza la tuya. 2) Si vives bastantes años, sufrirás la pérdida de seres queridos. La Pascua te garantiza que volverás a encontrarte con ellos otra vez, vivos, inmortales ¡y como Jesús!.    

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