martes, 17 de septiembre de 2013

Sansón y José (2)

                                                                     Sansón fue un fracasado, y José un campeón. Sansón tenía todo a su favor; era el resultado de un nacimiento milagroso, criado por unos padres fieles a Dios y poseía una fuerza sobrenatural. Con todo y con ello fracasó miserablemente. ¿Por qué? No se acordaba de Dios. La única vez q1ue leemos que Sansón clamó a Dios fue cuando estaba en problemas. ¿Te suena? Si hicieras una autopsia a tus grandes fracasos, en alguna parte te encontrarías con que habías abandonado tu relación con Dios. No puedes poner en marcha tu automóvil con el depósito vacío, trabajar con el estómago vacío o pagar facturas con la cuenta bancaria vacía.Y tampoco puedes vivir una vida victoriosa sin acordarte de Dios. Se negó a vivir según la Palabra de Dios.Cuando lo confrontaron sus padres por querer casarse con la mujer equivocada, Sansón les dijo: "...Es la que me gusta..." Cuando te dejas llevar por los sentimientos en lugar de por la palabra de Dios, te buscas problemas. Una de las mejores definiciones  de "desobediencia" es "obediencia incompleta" No puedes elegir qué parte de la Biblia quieres vivir y hacer oídos sordos al resto. No tenía la motivación adecuada. Al contrario que José, que brindó perdón a quienes le habían hecho daño, Sansón pidió por venganza. En cuanto cedes ante el resentimiento, permites que cualquier persona que no sea Dios te dicte qué hacer, y al final acabas sufriendo todavía más. La codicia le motivaba. Relacionandose con los filisteos, apost´´o con treinta de ellos: "...Si no me descifráis el enigma...me quedaré con los treinta vestidos..." A lo mejor piensas: "¿ Y a mi qué ?. Si le pasó a Sansón ¡también te puede pasar a ti!.   

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