La Biblia dice: "...El Señor contestó la oración de Isaac, y Rebeca quedó embarazada de mellizos. Pero los dos niños luchaban entre sí dentro de su vientre. Así que ella consultó al Señor; - ¿Por qué me pasa esto? - preguntó. Y el Señor le dijo - Los hijos que llevas en tu vientre llegarán a ser dos naciones, y desde el principio las dos naciones serán rivales. Una nación será más fuerte que la otra; y tu hijo mayor servirá a tu hijo menor"
Aunque tu visión haya nacido de Dios pasarás por unas épocas de fe y otras de temor. Puedes tener claridad en un área y sin embargo sentirte confuso en otra.
¿Te sientes temeroso y con malos presentimientos en medio de tus logros? Te estás preguntando '¿Qué me pasa? Si todo está saliendo bien ¿por qué estoy tan ansioso? ' Has triunfado en ciertas áreas y las cosas empiezan a avanzar después de un largo período de pruebas y dificultades. Pero en lugar de sentirte feliz estás decepcionado porque no tienes el gozo y la satisfacción que esperabas; incluso te estás preocupando de lo que podría ir mal en el futuro. En todas las carreras al éxito encontramos capítulos de incertidumbre. Si eso es lo que te pasa, presenta tu desasosiego al Señor. Pídele que te ayude en tus conflictos internos y que te conceda paz respecto a la tarea que te ha encomendado. Y recuerda, sea lo que sea que logres, esto te satisfará sólo hasta un punto. Ningún triunfo por grande que sea, podrá tomar nunca el lugar de Dios en tu vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario