Pilato tuvo la oportunidad de declarar inocente a Jesús y dejarlo en libertad, pero en vez de eso pidió una palancana y se lavó las manos del asunto. Su actitud fue 'No me voy a inmiscuir en esto'. Y mucha gente tiene una misma actitud. Pero no así Jesús. La noche antes de su muerte pidió una palancana de agua y les lavó los pies a los discípulos. Les enseñó: "...El que quiera hacerse grande entre vosotros, será vuestro servidor" Pedro puso objeciones porque lavar los pies era la tarea designada al siervo mas bajo den las casas del Medio Oriente, por lo tanto considerada indigna para Jesús. Alguien escribe: Nosotros los discípulos tenemos que ser los siervos, en eso yo estoy de acuerdo con Pedro. Sin embargo Jesús le respondió: "...Si no te lavo no tendrás parte conmigo" Este es un concepto maravilloso y sorprendente. A menos que yo crea que Dios me ama tanto, a menos que lo acepte por fe como mi Dios y también mi siervo, a menos que entienda que Él procura mi bienestar...no puedo disfrutar de Su compañerismo".
Es algo radicalmente opuesto a la filosofía del mundo, donde todos quieren dirigir y nadie servir. Pero ser como Jesús significa ser siervo, porque así se llamó a sí mismo . No te propongas nunca metas demasiado grandiosas, para que no te ciegues a las necesidades de los que te rodean. Sin un corazón de siervo estarás tentado a usar tus dones para tu beneficio personal, o te eximirás de tareas diarias que consideras que son indignas de ti. Pero la única forma de servir a Dios es servir a quienes Dios ama.
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