Hoy en día estamos levantando una generación sin ninguna formación bíblica. En una encuesta llevada a cabo sobre este tema, nueve de cada diez personas no sabían recitar ni uno de los diez mandamientos o nombrar uno de los cuatro primeros libros del Nuevo Testamento. ¡ Hasta un hombre pensaba que Dan y Beerseba eran marido y mujer ! ¡Y otro creía que "espístola" era la mujer de algún apóstol ! Nos hace gracia, pero es un tema tremendamente serio. Dios dice: " Mi pueblo (está siendo) destruido por falta de conocimiento" y Jesús afirma: "... ¿No erráis por esto, porque ignoráis las Escrituras...?
Muchos de los problemas para los que pedimos consejo se podrían resolver, y en ocasiones hasta evitar, si dedicáramos un tiempo cada día a profundizar en la Palabra de Dios. La razón por la que muchos de nosotros estamos espiritualmente enfermos no es porque haya fracasado el medicamento, ¡sino porque no lo tomamos! Lo que ocurre es que lo único que nos motiva son las recompensas. ¿Quieres estar fuerte espiritualmente? Profundiza en La Palabra de Dios. ¿Quieres que te vaya bien en la vida? Profundiza en La Palabra de Dios?.
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