martes, 20 de mayo de 2014

....y el señor añadía cada dia...

                                                          A Dios no le importa que la cantidad de personas que acudan a tu iglesia sea pequeña. A lo que se opone es a que la iglesia tenga una visión pequeña, puesto que eso limita lo que Dios puede hacer a través de ti. Se cuenta la historia de un turista que visitaba un pueblecito inglés. Éste le preguntó a un anciano: ¿Tiene algo de especial este lugar?. El anciano sonrió y dijo: 'Sí, desde aquí puede usted empezar y después ir a cualquier lugar del mundo'.
                                                          Estás llamado a invitar a los de fuera. Dirás: ¿No es el trabajo del pastor?. No, él es un pastor de ovejas, y como tal no da a luz a las ovejas, sino que son éstas las que se reproducen. ¿Cuando fié la última vez que trajiste a alguien a la iglesia? Si descubrieras una cura para el cáncer o para el alzhéimer, ¿no la darías a conocer?
                                                           Jesús dijo: "Un hombre hizo una gran cena y convidó a muchos... envió a su siervo a decir a los convidados:'Venid que ya todo está preparado' Cuando los invitados empezaron a poner excusas sobre por qué no podían ir,dijo el señor al siervo: Ve por los caminos y por los vallados, y fuérzalos a entrar para que se llene mi casa" Fíjate en las palabras "fuérzalos a entrar". En términos modernos: llévalos en tu coche, organiza un desayuno antes del culto o una comida después. Sé creativo, haz lo que te se ocurra, pero ¡traélos a la iglesia!.   

No hay comentarios:

Publicar un comentario