La segunda parte de la oración del padrenuestro tiene que ver con nuestro diario vivir: Tu padre quiere suplir tus necesidades físicas y financieras . A Dios le preocupan las necesidades diarias más que a ti. Él quiere ayudarte en tu necesidad. El "panadero" divino nos da el pan fresco todos los días. Así que confía en que Él suplirá todas tus necesidades hoy, y también mañana.
"Perdónanos nuestras deudas, como también perdonamos a nuestros deudores" En el momento que entras en la presencia de Dios, te conciencias de tu pecado. Y el diablo tratará de condenarte. ¿Como? Haciéndote sentir incómodo y no bienvenido a la presencia de Dios.Pero el diablo es un mentiroso, porque "ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús..." . La Palabra de Dios identifica varias categorías de pecado que tenemos que reconocer. El quedarnos corto de lo que se nos requiere; el incumplimiento de una regla; los descuidos inintencionados o tal vez motivados; la desobediencia y rebeldía deliberadas: el no pagar tus deudas; el pecado de omisión. Sea cual sea tu pecado, en el momento en que lo confiesas y pides a Dios que te perdone, Él te restaurará.
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