jueves, 19 de marzo de 2015

La persona que aspiras a ser

                                                   Dios te creó y sabe cual fue Su plan para tu vida al crearte.Ha colocado algunas "buenas obras" para que las hagas, pero estas no tienen por qué ser como esas "tareas" que escribimos en una lista para nuestro cónyuge o empleados. Son señales de tráfico para tu ser verdadero. Tu vida espiritual no se limita a ciertas actividades devocionales, sino que consiste en que Dios te capacita para llegar a ser la persona  que Él tenía en mente cuando te creó. Pero al igual que no hay nadie que logre ser feliz porque su meta sea ser feliz, no lograrás ser la persona que Dios quiso que fueras si solo te preocupas de ti. Florecer tiene que ver con una misión mas noble, y no sucede cuando nos cuidamos de nosotros mismos. Las personas que florecen son de bendición para los demás y lo hacen circunstancias desesperadas y difíciles.
                                                    De vez en cuando puedes atisbar como quería Dios que fueras . Por ejemplo cuando dices algo que inspira, cuando muestras compasión,cuando perdonas una vieja herida,  cuando das con sacrificio o cuando te abstienes de decir algo que normalmente soltarías. Y al hacerlo, vislumbras por un momento para que te creó Dios. Sólo Él conoce todo tu potencial y va encaminándote siempre a la mejor versión de ti mismo. Dios usa muchas herramientas, nunca tiene prisa - y eso te puede frustrar -Pero en medio de la frustración Él está activo desarrollando en ti paciencia. Nunca se desanima por el tiempo que le pueda costar y se deleita cada vez que creces. Solo Dios puede ver "la mejor versión de ti" y le preocupa incluso más que a ti que alcances tu máximo potencial.      

No hay comentarios:

Publicar un comentario