sábado, 4 de julio de 2020

Unir a dos familias (1)

                                             Si estás tratando de juntar a tus hijos y a los de tu cónyuge y crear una gran familia feliz, a continuación te presentamos unas ideas prácticas ofrecidas por consejeros matrimoniales: Lo que podemos llamar un "sueño romántico", nuestros hijos lo perciben muchas veces como un trastorno desestabilizador. Sé consciente de que no va a resultar fácil resolver los problemas o crear un ambiente de intimidad. Medita continuamente en 1 de Corintios 13: la clave para una familia estable es el "amor". Tendrás que ponerlo en práctica a diario. Tus hijos siguen tu ejemplo, así que en momentos de tensión, mantén una actitud amorosa. Recuerda que tú pudiste elegir, pero tus hijos no. No pidieron estar en esta situación, así que ponte en su lugar y esfuérzate para que se sientan cada vez mas seguros durante el tiempo difícil de la transición.
                                            No esperes una felicidad instantánea. Sé realista acerca de las dificultades de mezclar dos familias. No existe la intimidad instantánea ni la compatibilidad absoluta. Se necesita tiempo para crear vínculos sólidos y estabilizar a una familia, por lo tanto, tómate las cosas con calma. Concédete un tiempo de duelo por las pérdidas ocurridas. Jesús dijo: "...Los que lloran...recibirán consolación" Cuando un padre o una madre se casa por segun da vez, muchos niños ya han vivido en tres hogares diferentes: el de la familia biológica, el de la familia uniparental y ahora el de la familia "mezclada". Por otra parte, si tus propios hijos no viven contigo, también sentirás un sentimiento de pérdida. Si no eres consciente de todos estos aspectos, el resultado será enojo y distanciamiento; para evitarlo, trata con el pasado  antes de embarcarte en el futuro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario