Las historias de Nehemías pone de manifiesto cuatro causas principales del desánimo. Analicemos la primera: el cansancio. El pueblo de Judá dijo : "Las fuerzas de los acarreadores se han debilitado..." En otras palabras, han trabajado tanto que están agotados. Estaban exhaustos física, mental y emocionalmente. A veces cometemos el error de pensar que el desánimo es un problema estrictamente espiritual. Y decimos 'Tal vez tenga que volver a rendir mi vida a Dios', cuando el único problema es que estamos quemados. Necesitamos descanso y renovación . De hecho, a veces lo más espiritual que puedes hacer es relajarte, ir a la cama o tomarte un tiempo libre. ¿Cuándo aparecieron el cansancio y el desánimo? Veamos el versículo 6: "Edificamos, pues, el muro, y toda la muralla fue terminada hasta la mitad de su altura....".
¿Sabes cuándo somos mas propensos a desanimarnos? ¡Cuando estamos a mitad del proyecto! Todo el mundo trabaja duro al principio. La Biblia dice que: "...el pueblo trabajó con entusiasmo" Cuando pasa la novedad del trabajo se hace aburrido. La visa entra en una monotonía, luego en una rutina y después en una costumbre. Ten cuidado: cuando el cansancio entra en tu vida, la fe sale de ella. Por eso dijo el salmista: "En lugares de verdes pastos me hace descansar; junto a aguas de reposo me conduce. Él restaura mi alma" El cansancio es un a de las causas mayores del desánimo y a veces se manifiesta a mitad del camino. Por eso dejamos tantos proyectos inacabados. Por lo tanto ,si necesitas tomarte un tiempo libre, tómatelo.
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