Superándolo juntos

                                                                      Alguien comenta: "Cuando nuestros dos hijos tenían cuatro y seis años, descubrí que estaba embarazada. Dos semanas después perdí el bebé, lo que nos embarcó en un período emocionalmente  difícil....Mientras yo me recuperaba, mi marido lo llevaba de maravilla, pero en cuanto estuve físicamente bien, la pérdida le sacudió a él...Se encerraba en sí mismo...no quería visitar a su familia...solo quería estar en casa, (mientras que) yo quería olvidarme de aquello...pasar a lo siguiente...rodearme de gente. Cuando una pareja se enfrenta a algo que afecta de manera distinta a cada uno,¿cómo se hace para que funcione? 1) Dile a tu cónyuge que lo necesitas. A veces las emociones son tan potentes que no sabes lo que necesitas. ¿Necesitas tu espacio? ¿Quieres hablar de ello? ¿Quieres rodearte de gente o estar solo? Ten en cuenta los sentimientos de tu compañero. Puede que necesitéis cosas distintas. 2) Soluciona el problema desde la base. Mi marido no quería visitar a su familia...al hablar de ello descubrimos que el verdadero problema era que no pensaba que su familia le fuera a apoyar, y además, no se encontraba con ganas de viajar más de mil kilómetros. 3)Prepárate para ceder. Yo quería divertirme, aunque no fuera con su familia. Pudimos satisfacer las necesidades de los dos juntándonos con familiares que estuvieran más cerca de casa. 4) Pide ayuda. A veces no se puede transigir. Uno quiere hablar y el otro no aguanta que le saquen el tema. Habla con un consejero o con un amigo de confianza que pueda cumplir esa necesidad de comunicación por un tiempo. Orar por otros y que oren por tí es también de inmensa ayuda. Protege la intimidad de tu matrimonio y no permitas que nada ni nadie se interponga entre vosotros".