viernes, 12 de junio de 2020

Dios no olvidará su promesa

                                             Cuando Noé hablaba de la lluvia venidera, ésta era un símbolo del juicio de Dios. Pero después del diluvio Dios dijo: "...Nunca más...." Y añadió: "...Se dejará ver mi arco en las nubes. Y entonces me acordaré de mi pacto con vosotros...y no habrá más diluvio de aguas para destruir...." Desde ese momento, la lluvia se convirtió en un símbolo de bendición en la Biblia: "...Os abro las ventanas de los cielos y derramo sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde". ¿Tienes miedo de que el sufrimiento del pasado vuelva a aparecer? Tranquilo, persevera en tu camino con el Señor, quién prometió: "Nunca más".
                                               Cuando Dios usa algún suceso de tu vida--el cual podría haberte destruido--para desarrollar tu carácter, miras hacia atrás y puedes decir con el salmista: "Me hizo bien haber sido afligido, porque así llegué a conocer tus decretos". Sin tribulaciones, no podrías haber aprendido ciertas cosas: por ejemplo, que las presiones pueden crear en ti una pasión para buscar más intensamente a Dios; o el poder de tus oraciones; o cómo Dios puede actuar en medio de la adversidad; o que cuando te vió llorar: tus lágrimas le fueron tan preciosas que las recogió y guardó en su redoma; o que el ángel del Señor te protegió cuando el enemigo quería derribarte; i que Dios no necesitó a nadie para apoyarte y bendecirte, y te sacó de aquella situación difícil; y todo porque vió el arcoiris y se acordó de su promesa. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario