jueves, 18 de enero de 2018

Contamínalos

                                                  Tita Nava, una señora de 80 años de edad , dio su testimonio en una iglesia de  Manila, Filipinas. Profesora y administradora universitaria jubilada, había estado buscando a Dios en los últimos años. Quería una relación con un ser vivo, no con una estatua". Una amiga le recomendó que asistiera  a un grupo llamado "Las chicas de oro", el cual estaba vinculado a una iglesia evangélica.
                                                  Tita empezó a asistir al grupo regularmente, abrió su corazón a Jesús y nació de nuevo. Testificó que Jesús le quitó su manera de hablar hiriente, su espíritu crítico y su orgullo intelectual. En lugar de ello le dio gozo.
                                                   Tita describió lo que sucedió cuando empezó a poner en práctica su fe  delante de sus amigos: "Mi grupo anterior empezó a tratarme como si hubiese contraído una enfermedad mortal contagiosa"Luego, guiñando un ojo dijo:"Espero contaminarlos".
                                                     En los primeros días de la Iglesia, el evangelio de vida se propagó rápidamente por toda Jerusalén . Pero los líderes religiosos trataron as este nuevo movimiento como una enfermedad mortal e intentaron detener su crecimiento. Si has depositado tu fe en Cristo, expón a rus amigos a la verdad. "Contamínalos" con el mensaje de vida del evangelio.

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