Alguien escribió: "Leí un libro interesante de un no creyente que se había propuesto "cargarse" la fe cristiana. A pesar de no creer, dijo algo que encontré muy interesante respecto a la oración- Él la denominó "la arrogancia más increíble de la historia de la humanidad". Alegó que si trabajaras en General Motors como un simple peón y quisieras ver al jefe no tendrías la más mínima posibilidad....Piénsalo bien. ¿Qué pasaría si un ciudadano de a pie quisiera hablar con el Presidente de los Estados Unidos? Estoy tentado a llamar solo para ver qué pasa....Lo más probable es que hable con un secretario, o con el ayudante de alguien, pero no con el Presidente.....'Entonces, siguió este hombre escéptico en su libro' qué increíble arrogancia pensar que podemos hablar en cualquier momento con "el jefazo".
Es verdad, el concepto de oración sería una arrogancia supina....si no fuera cierto. Pero lo es .... Y es la condescendencia más extraordinaria de parte de un Dios misericordioso. Es muy probable que nunca llegues a hablar con alguien de las altas esferas de este mundo, sin embargo la persona de mayor rango del universo---el jefazo--- espera pacientemente escuchar lo que tienes que decir. ¿No te parece maravilloso? En este día....puedes hablar con el jefe y comentarle tus preocupaciones e inquietudes; Él siempre tiene tiempo para escucharte. La oración te da acceso a Dios.
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