Ora por el favor de Dios (2)

                                             Para ver cómo se manifiesta el favor de Dios, examina la vida de José. "Israel amaba más a José que a todos sus hijos...y le hizo una túnica de diversos colores. Al ver sus hermanos que su padre lo amaba más que a todos ellos, lo aborrecían ...Tuvo José un sueño y lo contó a sus hermanos, y ellos llegaron a aborrecerlo más todavía" Resaltaremos dos aspectos de este relato. Primero, el favor de Dios es un regalo, no una recompensa por ser mejor que los demás. No te excuses por tener la bendición de Dios en tu vida, pero tampoco la lleves como unam medalla de honor que indica superioridad. Pablo pregunta: "...¿Qué tienes que no hayas recibido? La respuesta es ¡nada! No olvides eso y vive con una actitud de agradecimiento. Segundo, para caminar en el favor de Dios hay que ser sabios. Los hermanos de José dijeron: "...Ahí viene el soñador!...Venid, matémoslo...Veremos entonces qué será de sus sueños". Es un error compartir tu sueño con alguien incapaz de apreciarlo. Por fuera parece que se alegra, pero en el fondo le molesta y te envidia. Al hermano mayor del Hijo Pródigo, no le entristecía que su hermano estuviera pasando hambre en un país extranjero cuidando cerdos. Sin embargo, no soportó las celebraciones a su vuelta a casa. El rey Saúl se alegró cuando David mató a Goliat, pero se disgustó sobremanera cuando el pueblo proclamaba: "Saúl mató a sus miles, y David a sus diez miles", Jesús dijo unas palabras muy fuertes al respecto: "...No echéis vuestras perlas delante de los cerdos..." Por lo tanto, usa tu mejor criterio y habla sólo cuando es debido, busca agradar a Dios y su favor te acompañará.