Cuando el escritor del libro acerca de la Revolución Francesa, pidió a su vecino que lo leyera. Días más tarde, el vecino llegó a casa del escritor pálido y descompuesto. ¡Su criada había usado el manuscrito para encender la chimenea! El escritor se desesperó--¡dos años perdidos!Escribir el primer manuscrito había sido ya una tarea de enormes proporciones; volver a escribirlo era impensable. Hasta que un día observó a un albañil levantar una pared. Se dió cuenta de que lo hacía ladrillo a ladrillo. Inspirado pensó: 'Escribiré una página hoy, y otra mañana. Una por una; sólo pensaré en la página que escribo en el momento.' Fué un proceso lento y tedioso pero perseveró, y su segunda obra fue mucho mejor que el original.
Alguien comenta: "Si te preocupa el futuro....entiendo como te sientes. Perdí el trabajo en 2001...mi empresa se hundió más rápido que el Titanic....Pensé que esa era lo peor que me había pasado en la vida , Estuve a punto de ir a la bancarrota. Tenía esposa, dos hijos, una hipoteca, muy pocos ahorros y me quedé sin seguro médico. Faltó muy poco para perderlo todo...tuve que tomar decisiones importantes. Y eso me condujo a mi ocupación actual de escritor, consultor y orador. Pasé de ser desempleado a tener un empleo que me entusiasma. El despido laboral me hizo descubrir la misión de mi vida...lo que yo pensaba que era lo peor...abrió la puerta a lo mejor...Cuando nos golpea la ola, tenemos dos alternativas...o dejamos que nos aplaste, o aprendemos de eso y nos embarcamos en un porvenir más positivo. Podemos avanzar con determinación y fe, sabiendo que nuestros mejores días están por llegar."
Alégrate, vuelve a considerar tus opciones; Dios puede transformar la maldición en bendición.
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