En la lengua china el símbolo para la palabra "crisis" es el mismo que para "peligro" y "oportunidad". Cuando hay demasiadas cosas en juego y no se sabe cual va a ser el resultado, de la crisis puede nacer un propósito, como sale la belleza de las cenizas. Pero no se iniciará la verdadera sanidad hasta que no enfrentes los hechos y expreses tu dolor. Para ello, deberás presentárselo a Dios. como hizo David: "Hasta cuando tendré conflictos en mi alma, con angustias en mi corazón cada día?.
Para sanar una herida infectada primero hay que abrirla y limpiarla; de igual manera, el primer paso para la sanidad completa es confrontar la realidad.
Aquéllos que han pasado por crisis saben qué esperanzas, qué sueños y qué expectativas se truncan en el proceso. Asimismo, reconocen qué cosas deben ser reparadas, y por último se proponen un plan para el futuro. Al principio, te sientes como que "nada será como antes"; y es normal. Tal vez tengas que hacer algunos ajustes en tu forma de trabajar, de gastar el tiempo de ocio y de relacionarte con tus amigos y familiares. Cuando pasas por crisis, tu mundo se desestabiliza. Pero también estas situaciones te fuerzan a sondear tu interior y descubrir una fortaleza interna que no sabías que poseías
Es probable que ahora mismo no te sientas con mucho coraje ni gran esperanza, lo cual no quiere decir que esas cosas no estén ahí , prontas a aflorar. Aunque no creas que eres fuerte hoy, podrás obtener la fortaleza del Señor, que es "...roca mía y castillo mío, mi libertador; Dios mío...en Él confiaré". Enfrenta la crisis, busca a Dios en medio de ella, síguele, y Él te concederá un mañana mejor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario